domingo, julio 03, 2005

Taller de promoción

Me encanta el taller piloto que estamos haciendo sobre promoción para profesionales independientes y emprendedores. No es casual que los profesionales participantes sean coaches. Porque son los que tenemos más cerca, pero además porque no resulta fácil ponerle un nombre y un contenido concreto que sea fácilmente trasmisible al público a la actividad de un coach que se mete en territorios no convencionales. La metodología que estamos probando apunta a descubrir cuál es el corazón de lo que hacemos, en lo que somos auténticamente nosotros, pasa por la selección de las herramientas de promoción afines con cada uno y termina sólo después del lanzamiento con esa nueva identidad con el seguimiento de los resultados y el apoyo en las correcciones que sean necesarias. "Cortito y efectivo" le dije a una participante y le gustó. Lo que no quiere decir que sea fácil. Implica un intenso trabajo de sondear en lo escencial de ese servicio y una gran capacidad de síntesis y de comunicación efectiva (que paradójicamente nosotros se supone que deberíamos tener).
Además, supone elegir un nicho. Leí a alguien (no recuerdo quién) que dijo que si los posibles clientes no son localizables en la guía telefónica, no constituyen un nicho, sencillamente porque no sería fácil convertirnos en oferta para esa gente.
Conocer al nicho significa que sé mucho de ellos: dónde los encuentro, qué tienen en común, cómo pasan el tiempo libre, qué valoran de trabajar conmigo, qué leen, qué organizaciones los nuclean. Si estoy empezando, quién quiere y necesita lo que yo ofrezco, quién puede pagarlo, qué buscan, cómo me encuentran, qué características tienen. Y sobre la base de lo que descubro haciéndome esas preguntas: qué promesas le hago a mi nicho, qué quiebre le voy a resolver, qué beneficios le voy a proveer, qué ventajas voy a ofrecer. Con todo eso: cuál es mi propuesta específica y única? LLegar a una síntesis de eso no me resultó fácil y veo que a otros tampoco. Buena noticia! No será fácil el proceso, pero el resultado se siente bien. Como una prenda que "nos va".

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